Una desgarradora mirada a la carencia

Póster oficial

La soledad se ha visto retratada innumerables veces dentro del cine, historias donde esta carencia resulta melancólica como en Her (2013, Spike Jonze) o irremediablemente dolorosa como en Aftersun (2022, Charlotte Wells), una mezcla de estas sensaciones obtenemos con la nueva cinta de Andrew Haigh, una adaptación de la novela Strangers (1987) del japonés Taicha Yamada.

All of us strangers, una historia que nos sumerge en la vida de Adam (Andrew Scott), un joven en sus treintas que vive solo en un departamento a las afueras de Londres, en seguida sabremos que, sus padres fallecieron en un accidente automovilístico cuando Adam tenía apenas 12 años.

Una exploración hacia el pasado, hacia sus raíces, lo hace regresar a visitar su antigua casa, aquella que habitó junto con sus padres, Adam es
sorprendido por su presencia, los puede ver, escuchar, conversar con ellos, quienes lucen de misma la edad en la que fallecieron, una etapa similar de vida en la que se encuentra su hijo, a la par de este suceso, conoce y comienza una relación con Harry (Paul Mescal), un chico que vive en la misma torre de departamentos que él, este nuevo vínculo le dará un nuevo ritmo a la vida de Adam.
La película es un intrigante viaje de autodescubrimiento, de introspección viendo hacia uno mismo y hacia el pasado, los traumas y heridas que se generaron a una edad temprana. Y a la vez, es una exploración en la conexión entre un par de extraños que nos traerá revelaciones verdaderamente sorprendentes.

En todo momento, estaremos observando a través de los ojos de Adam, todas las percepciones en escena son de él, lo que nos llevará a preguntarnos como público qué es lo que es real y lo que no lo es, aunque en absoluto, para nuestro protagonista todo lo vivido es verdadero.

Un drama inquietante con un guión bastante orgánico, las conversaciones entre Harry y Adam se perciben tan reales, tan naturales, temas que uno tocaría con amigos o pareja en la vida real, aspecto que es favorecida por las tremendas actuaciones de Scott y de Mescal, el primero apuntando para ser una de sus mejores actuaciones en su filmografía, una
interpretación compleja, difícil emocionalmente, memorable, uno siente la angustia de cada decisión que Adam toma.

Por su parte Paul Mescal es un poco más juvenil, efervescente,
vivaz, es quien representa el lado luminoso de la relación. Pero a la par de estos irlandeses se debe mencionar a la gran Claire Foy quien hace una excelente mancuerna con Jamie Bell siendo los padres de Harry, un cast breve pero impactante. La fotografía es bastante bella a pesar de no contar con muchos escenarios, es armoniosa y bien pensada.
Sin lugar a dudas, All of us strangers dejará a varios con el corazón acelerado, con esta cuestión rondando en su cabeza: ¿qué le dirías a tus padres si tuvieran la misma edad que la tuya actualmente?, ¿qué temas compartirían?

Así como, inevitablemente, voltear hacia el pasado, hacia aquellas heridas aún abiertas, explorar su origen para poder cerrarlas y
contemplar y acariciar a nuestro niño interior.