The Flash llega corriendo para intentar salvar el Universo DC en el cine.

Póster oficial

“Acepta las cosas que no puedes cambiar, ten el coraje para cambiar las que puedas, y pide sabiduría para conocer la diferencia”.

Nora Allen (Justice League: The Flashpoint Paradox, 2013)

Con esta frase tan emblemática se identifica un cómic fundamental dentro de la historia de DC Cómics, nos referimos al icónico Flashpoint, una historia donde éramos testigos de como el poseedor de la fuerza de la velocidad conocido como The Flash, cambia el canon que todos conocíamos en DC.

Por allá del 2017 se anunció que tendríamos un filme protagonizado por el «corredor escarlata» en el denominado “Universo extendido de DC”, que tenía previsto una serie de películas interconectadas muy al estilo de su competencia. Lamentablemente la era del desastre en Warner Bros. Pictures comenzó y con ella, muchos proyectos entraron en fase de espera o se cancelaron y entre ellos estaba este proyecto.

Al final y con una nueva administración, se decidió que habría luz verde para Flash, aunque tuvieron que pasar varios años, directores y guionistas para por fin ver en pantalla grande lo que alguna vez sería una especie de cinta de origen a una adaptación de uno de los mayores eventos en el mundo del cómic.

Bajo la dirección del argentino Andy Muschietti y la producción de su hermana Bárbara Muschietti, llega a toda velocidad The Flash donde se despiden del DCEU como lo conocíamos para abrirle paso a un nuevo universo que promete darnos por fin algo que podamos disfrutar sin temor de caer en lo “diferente, oscuro y maduro”.

Barry Allen es ahora parte de la denominada “Liga de la Justicia” teniendo la tarea de apoyar en todo momento cualquier desastre o eventualidad que se presente (en pocas palabras, es el encargado de limpiar el desastre). Por si fuera poco, el veredicto final sobre el caso de su padre acusado por haber asesinado a su madre se revelará próximamente, esto logra que nuestro héroe tenga sentimientos encontrados al no poder tener pruebas que aclaren esta injusticia y sea invadido por una nostalgia abrumadora cuando recuerda a su familia unida y feliz.

Gracias a esto, nuestro protagonista corre tan rápido que logra moverse a través del tiempo y el espacio, y al hacerlo, le llega la posibilidad de poder cambiar el pasado para recuperar a su familia. Pero las consecuencias de cambiar el mínimo detalle en la cronología de la historia es grave y esta no es la excepción, detonando un cambio en la línea de tiempo original que ahora tendrá que arreglar, sin embargo no va ser una tarea nada sencilla al toparse una versión más joven de él.

Argumentalmente estamos ante una adaptación del ya mencionado “Flashpoint” que su esencia está plasmada de una manera muy singular al utilizar la base de este cómic, pero evidentemente haciendo alteraciones para no ser una calca. A pesar de ello, estamos ante un guion que cuenta con algunos agujeros y que por momentos está realmente construyendo algo, lamentablemente cuando está en ese punto, ya no continúa el proceso y por ende, se da prioridad a otros elementos.

Pero a pesar de no tener una trama congruente, podemos ser testigos que en dos horas y media logran captar la atención del espectador gracias a las referencias, cameos y secuencias de acción tan bien llevadas que junto a un nivel de comedia bastante acertado al no abusar de esta, pero tampoco contener la denominada “de pastelazo”.

El tema del multiverso es la tendencia del momento, lo hemos visto desde Dr. Strange y El Multiverso de la Locura e incluso recientemente en Spider-Man: Across The Spider-Verse y aquí no iba ser la excepción gracias a que el material original del cual se adaptó también habla de este tema. Pero tocar este tópico para nada es fácil, conllevando una importante labor al momento de utilizar este recurso para no caer en justificaciones como la ya conocida: “El poder del guion”.

Hay que tener en cuenta que se declaró que el guion pasó por al menos 40 manos y al final se dio crédito a Cristina Hodson, John Francis Daley, Jonathan Goldstein y Joby Harold, con este número es igual de alarmante pues entre más involucrados en este apartado no es un indicativo de calidad. Otro factor a destacar es la importancia de cerrar un ciclo que no fue nada beneficioso para el estudio y dando una especie de homenaje a lo que logró construir el director Zack Snyder, pero cuyo fandom puede que lo tome como un insulto en vez de lo anterior. 

El elenco es de valorarse gracias al excelente desempeño de estos mismos comenzando por el polémico Ezra Miller quien nos demuestra que a pesar de todo, nació para ser él mismo Flash/Barry Allen. El retorno del legendario Michael Keaton como Batman es simplemente sublime, llenando sin problema alguno el hueco que dejó el de Ben Affleck, disfrutando cada secuencia en la que aparece, sobre todo para quienes crecieron con esta versión del murciélago de gótica. 

Debido al no tan buen manejo de guion, Sasha Calle realmente se siente desaprovechada como Supergirl, pero cabe aclarar que eso no demerita para nada su interpretación como una de las últimas sobrevivientes de Krypton por lo que esperamos que podamos volver a verla portada la capa en un futuro proyecto de este nuevo universo liderado por James Gunn.

A estas alturas el apartado de efectos visuales siempre es un tema a debatir y no estamos ante la excepción dejando bastante claro la decadencia en este. Por momentos hay un rayo de esperanza al ver secuencias fantásticas como la del inicio del largometraje pero conforme vamos avanzando en los acontecimientos, se nota el poco presupuesto invertido que se lleva como daño colateral la mezcla de sonido e iluminación. 

Todos aquel que es fan de Flash sabe la importancia que tiene este dentro del universo de DC al incluso haber sido pieza fundamental para salvarlo en eventos como Crisis en Tierras Infinitas, por lo que no estamos ante una adaptación tan fiel de lo que representa ni mucho menos de sus historias al tener una amalgama fílmica, pero a pesar de ello no podemos negar que se pasa un excelente rato sobre todo cuando estábamos acostumbrados a productos que no llenaban las expectativas de la audiencia y esta no es la excepción pero se nota el gran empeño y dedicación para dar el salto a una nueva etapa.

El final realmente no nos da un mensaje concreto sobre si veremos más de este velocista o si la nueva línea de tiempo creada se convertirá en la oficial para la era que James Gunn y Peter Safran preparan, lo que sí esperamos es que DC por fin pueda construir algo concreto para el deleite de sus fans y no fans.

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