Una amistad extraordinaria.

Póster oficial

Bien dicen que la realidad supera la ficción, la naturaleza ha puesto ejemplos extraordinarios de ello con vínculos inauditos entre animales y humanos. Mismos que rebasan toda lógica y han motivado su difusión.

Mi amigo el pingüino (My Penguin Friend, 2024), dirigida por David Schurmann, es un drama familiar que retoma una asombrosa historia que sucedió entre un hombre y un pingüino. Traída a cines mexicanos por la distribuidora Corazón Films.

Después de la pérdida de un hijo en el mar, la vida de un pescador brasileño, João (Jean Reno), pareciera no tener reparo. Las cosas cambiaran cuando se cruce en su camino un pingüino manchado de petróleo y lo salve. A la pequeña ave la bautizaran como DinDim y esto marcará el inicio de una amistad inédita.

La propuesta cinematográfica de Schurmann esta basada en una historia real que sucedió en Brasil y que captó la atención mundial en 2011 por tratarse de un pingüino que anualmente visitaba a aquel hombre que lo salvó: recorriendo distancias récord y una ruta nunca antes vista. Narrativa que por sí sola envuelve muchos mensajes enternecedores y de reflexión; pero que además la cinta los explora aún a más profundidad debido a las nuevas aristas que agrega el guion. Pues por ejemplo, existen similitudes entre el fallecido hijo de João y DinDim; lo que genera momentos de mayor significado y un vínculo más estrecho entre el protagonista y el pingüino.

Esta amistad se ve perturbada por intereses que se generan al rededor del misterioso pingüino. Lo que genera un debate ético de hasta donde es correcto el análisis de un espécimen para justificar la perturbación de ecosistema y libertad. Además psicológicamente explora la soledad que tiene Joao y el impacto real que DinDim tiene en él. Una amistad de lo más fiel y noble, se presencia en pantalla.

Así como el guion explora posibilidades que detonan más variables dentro de la historia. Lo hace con cierto recato, pues conforme va llegando a su fin se va extralimitando. Me parece que la dirección busca resaltar lo bello y construir una historia que se sienta feliz, que como todo también tuvo sus momentos tristes en el intermedio. Pese a eso, deja una especie de final abierto que es más fiel a lo realmente sucedido.

Lo visual quizás es la parte que tiene sus detalles, pues el pingüino a veces no se ve tan real sobre todo cuando navega en el mar. En cuanto al ritmo, es oscilante; pues hay momentos de mucha angustia, pero a su vez descansos llenos de alegría. En general, las situaciones que se construyen acompañadas musicalmente y de buenos diálogos logran momentos cargados de emotividad.

Mi amigo el pingüino es una enternecedora cinta para toda la familia, donde se nos relata una fantástica historia entre un hombre y un pingüino. Que sorprendentemente se basa en hechos reales; pero que nos permite mediante sus variaciones de guion explorar más cosas que van desde lo ético a lo psicológico, incluso.

Tráiler oficial