Un bajo presupuesto que asusta por lo malo que es.

Póster oficial

Cuando de malas cintas de terror se habla, las cintas que Dark Side nos trae son las más extrañas, y no decimos que malas en sí, pero justamente son películas para aquellos que buscan algo más que un simple “jump scare”.

“Post Mortem” es una película de terror húngara que nos transporta al año 1918, justo después de la Primera Guerra Mundial. La trama gira en torno a Tomás, un soldado alemán que, tras morir brevemente debido a la explosión de una mina, milagrosamente vuelve a la vida. A partir de ese momento, Tomás dedica el resto de sus días a realizar fotografías post mortem, capturando imágenes de los difuntos como recuerdo para sus seres queridos.

Dirigida por Péter Bergendy, esta película marca el inicio de lo que pudiera ser una franquicia de cazafantasmas. A lo largo de la cinta, se pueden apreciar elementos artísticos espectaculares, desde la fotografía hasta los escenarios y el vestuario. Estos aspectos contribuyen a crear una atmósfera sombría y siniestra, sumergiendo al espectador en el mundo oscuro y misterioso de la fotografía post mortem.

El talento actoral es lo que mayormente sobresale en esta cinta, pues cada actor se ve comprometido con su personaje y nos ofrece la única herramienta que no se controla bajo ninguna moneda, su capacidad actoral, por lo que en este apartado es destacable como cada personaje a pesar de las limitaciones ya mencionadas entrega un trabajo sólido.

Sin embargo, es importante mencionar que algunos efectos visuales presentes en la película resultan inusuales o deficientes debido a las limitaciones presupuestarias. Esto puede distraer a algunos espectadores y restarles inmersión en la historia.

Además, “Post Mortem” puede resultar pesada para ciertas personas. La trama se desarrolla de manera lenta y pausada, lo cual puede hacer que la película se sienta arrastrada en algunos momentos. Sin embargo, para aquellos que aprecian el cine de terror más atmosférico y reflexivo, esta característica puede ser vista como una ventaja.

Uno de los aspectos destacados de la película es su mensaje profundo sobre el tránsito de las almas en pena hacia el llamado “otro lado”. La exploración de este tema brinda una dimensión emocional a la trama y plantea cuestiones sobre la vida, la muerte y el más allá. Estos elementos filosóficos agregan profundidad a la película y pueden resonar en el público que busca un contenido más reflexivo dentro del género de terror.

A pesar de sus posibles imperfecciones, “Post Mortem” ofrece una propuesta diferente dentro del género de terror, alejándose de los clichés habituales y brindando una experiencia más introspectiva. Si buscas una película de terror que combine elementos artísticos impactantes con un mensaje profundo, esta película podría ser de tu interés.

Esta cinta se encuentra ya en todas las salas del país, y si tú eres de esas personas a las que no les importa el presupuesto con el que se hacen las cintas, o si los efectos son baratísimos, esta cinta será una joya para ti.

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