Todos tenemos una caja que cargamos en nuestras vidas.

Póster oficial

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Ficha Técnica

• Director: Lorenzo Vigas
• Año: 2021
• Guión: Paula Markovitch, Lorenzo Vigas
• Fotografía: Sergio Armstrong
• Música: Mauricio Gonzo Arroyo
• Elenco: Hatzin Navarrete, Hernán Mendoza, Cristina Zuleta.
• Distribuidora: Cinépolis Distribución
• Fecha de estreno: 10 de noviembre de 2022

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La violencia y sus múltiples capítulos han adormecido a una sociedad al punto de hacer cotidianas todas sus consecuencias, dando como resultado una normalidad que tiene como principales sellos la indiferencia y el cinismo. Estos dos últimos términos han impulsado, curiosamente, la inspiración de cineastas y guionistas que buscan a través de sus obras retratos que impidan que esto se olvide o cuando menos, que el tema despierte el interés de las personas con el fin de contrarrestar los terribles efectos de este contexto tan deplorable.

Después de un largo camino de rodajes en entornos duros y de una pesada distribución que muchas veces lleva proyectos a ver la luz años más tarde (en el peor de los casos, sin llegar a proyectarse), La Caja llega a salas de cine con una propuesta de duro mensaje, historia llamativa y actuaciones comprometidas que busca ahondar un tanto en la situación de peligro que vive el norte del país, a la par de tocar otra mirada relativa a la paternidad.

La historia

Un adolescente mexicano viaja al norte del país para recoger los restos de su padre, enterrados en una fosa en el desierto. Una vez allí, el chico conoce a Mario, un empresario que se dedica a asuntos turbios, en quien ve a un nuevo padre.

Opinión 

Después de ganar reconocimiento con Desde Allá, cinta que lo hizo acreedor del León de Oro de la Biennal de Venecia en 2015, Lorenzo Vigas demuestra sus aprendizajes al construir una película efectiva en cuanto a lo técnico y que aprovecha esa convivencia de actuaciones con experiencia como de las que apenas comienzan, teniendo la dupla de Hatzin Navarrete y Hernán Mendoza como el principal punto fuerte.

Vigas acierta al apostar por mantener ese aire de documental, de mostrar una cara que se mueve en un terreno no tan explorado en el cine como lo es el de las maquilas, el del invierno del norte mexicano, el de las fosas que no son consecuencia del narcotráfico pero sí de la impunidad, de la explotación y de la pérdida que muchas veces se usa para aprovecharse de aquellos que no aceptan un vacío de algún familiar víctima de lo anterior.

Sin embargo, ese acierto se contrarresta con una ambigüedad que deja una interpretación libre que impide que las respuestas, sean cuales sean, que propongan mentalmente los espectadores, cuadren, cierren o cuando menos sean satisfactorias. Esto también crece por una edición que se siente de tajo, sin explicar del todo y centrándose en una travesía que deja un sabor agridulce que hace mayor impacto del agridulce relato.

El ritmo lento no termina por equilibrarse con las múltiples secuencias de violencia, mismas que tiene coherencia dentro de lo que sucede con la narración. Lo pausado, alarga un tanto la cinta, haciendo de los 90 minutos que dura la película un poco pesados, sobre todo por una apertura demasiado marcada en las resoluciones.

Además, existe cierta superficialidad en cuanto al tema de la desaparición que lleva a una potencial reflexión a un segundo plano por tocar varios temas y subtramas sin tanta efectividad, sin suficiente espacio. Y esto contribuye a que varias de las decisiones de Hatzin y Mario (personaje de Hernán) deban ser aceptadas por el espectador debido a que no se muestra el motivante de dichas elecciones.

Laafotografía de Sergio Amstrong es inteligente, ya que al combinar diferentes alturas, tomas y movimientos en su cámara, todos en la escena precisa, ayudan a que todos los escenarios se disfruten a la vez que el espectador podrá sentirse parte del entorno. El audio está cuidado, se entiende todo pese al ruido de los camiones, de la radio e incluso de las maquilas.

Retomando lo actoral, Hernán Mendoza hace un trabajo adecuado que se complementa con un compromiso físico y de acento chihuahuense, conformando un personaje que si siente de aquella región, a la vez que las interacciones con el joven principal dan pie a cierta duda que, nuevamente, queda abierta a resolución personal. En cuanto a Hatzin Navarrete, al ser su debut sorprende con una actuación que combina esa naturalidad adolescente con un abanico gestual y emocional que es bien guiado tanto por Mendoza como Vigas, cargando con el peso del filme.

Aunque deje dudas que no se responden, La Caja es una ventana bien realizada y con el suficiente suspenso para mantener atento al público, siendo un recordatorio, una caja que se lleva a cuestas en nuestra memoria social sobre lo frágil que es la vida.

Tráiler oficial