Un drama religioso acerca del juego político y mental en la religión.

Póster oficial

Cónclave es un drama religioso sobre el juego político y mental en la religión, un vistazo fascinante a los misterios del poder religioso. Con un excelente Ralph Fiennes en el papel del cardenal Lawrence y una dirección sublime de Edward Berger, quien nos entrega una brutal puesta en escena.

¿Quién diría que un drama religioso sobre lo que se vive durante el cónclave (la elección del papa) podría ser tan interesante? Edward Berger lo hizo posible. Durante el cónclave, el cineasta explora los prejuicios, la falta de fe en la humanidad y las limitaciones de cada hombre encargado de tomar esta decisión, que resulta de suma importancia para los católicos. Incluso, funciona como un espejo del mundo en general por las diversas nacionalidades que participan en estas elecciones y, por supuesto, por los mismos prejuicios.

La cinta contrapone la humanidad y la divinidad, la fe y la desesperanza, todo bajo “el óleo” de su impresionante puesta en escena y un guion muy eficaz. Es un retrato sórdido del egoísmo humano y de la lucha del hombre por alcanzar el poder absoluto. Con un elenco conformado por Stanley Tucci, John Lithgow, Isabella Rossellini y Brian F. O’Byrne.

Además, Berger aborda un tema muy importante que la Iglesia ha acarreado durante muchos años y que no ha logrado desmentir: la corrupción. Expone el abuso de poder de los cardenales y cómo muchas de las personas más desagradables con las que uno se puede encontrar en esta vida forman parte de esta comunidad. Gente que se proclama santa, pero que en realidad encarna el mismo mal que juran combatir.

El montaje es un punto clave en esta película y uno de sus grandes aciertos. Usando un poco de contexto, se puede comparar su edición con la de Oppenheimer del año pasado, en el sentido de que todas sus escenas son personas hablando, sin acción alguna. Sin embargo, estas escenas de diálogo puro se convierten en momentos dinámicos que entretienen más que cualquier escena de acción.

Ahí radica la belleza del montaje: cómo algo tan simple puede convertirse en arte. No extender las escenas más de lo necesario y lograr que dos horas se pasen volando. Cónclave es una de las mejores películas del 2024 y es una que no te puedes perder en cines este 9 de enero.

Tráiler oficial