Una cinta que cumple con entretener tanto a los fans del género como a quienes buscan pasar un buen rato.

Póster oficial

La saga de libros de Agatha Christie es famosa por contener historias que atrapan al lector desde sus primeras páginas. Fue mundialmente reconocido por ser la reina del misterio policial gracias a obras como El Misterioso caso de Styles, El Asesinato de Roger Ackroyd y cómo olvidar Asesinato en el Expreso de Medio Oriente y Muerte en el Nilo.

Los dos últimos mencionados ya cuentan con sus respectivas adaptaciones cinematográficas siendo producidas por 20th Century Studios y cuyos elencos han sido actores de gran nivel sin duda alguna. Pero a pesar de ello, no han tenido el mejor recibimiento por la crítica especializada o el público en general. 

A pesar de ello, las desventuras del famoso detective Hercule continúan en la pantalla grande y en esta ocasión llega “Caceria en Venecia” donde un nuevo misterio nos aguarda pero en esta ocasión, el elemento paranormal se hace presente para intentar intrigarnos de principio a fin.

Estamos ante la víspera de Halloween en la Venecia de posguerra, lugar que ha elegido Poirot para retirarse de su labor como detective al sentirse harto de todo lo que conlleva. Pero su retiro se ve interrumpido cuando una amiga del pasado que le pide que lo acompañe a una sesión espiritista y exhibir a una médium de sus charlatanerías; pero nunca imagino que dicha noche se llevaría a cabo un misterioso asesinato en el lugar donde se llevo a cabo esta practica y ahora, debe embarcarse en la oscuridad de la noche para descubrir al asesino.

Cabe destacar que esta entrega combina de cierta manera el factor paranormal para complementar la dosis de misterio, dando como resultado una entrega más atragante a comparación de sus dos antecesoras. Igualmente se nota el cambio drástico con respecto al ritmo narrativo pues en “Muerte en el Nilo” una de las quejas más recurrentes era precisamente el cómo se planteaba todo el conflicto. En esta ocasión se siente fluido y dinámico pero al mismo tiempo, un tanto apresurado, pero realmente no afecta al desarrollo de la trama misma.

El acto a resolver en esta ocasión realmente nos mantiene intrigados en la mayor parte del tiempo, logrando como resultado una experiencia inmersiva cuando vemos a nuestro querido detective entrar en acción. Conforme avanza el caso, es muy probable que el público ya haya descubierto al responsable de todo este acto, pero el proceso para llegar a ello, realmente es entretenido y no se siente rebuscado como lo fue incluso en entregas anteriores.

Sin embargo, de nueva cuenta estamos ante una adaptación donde no contamos con algo realmente fresco o que nos sorprenda. Si de algo se puede jactar las obras de la escritora Christie es por generar realmente un sensación atraparte y donde el lector no puede parar hasta no tener la respuesta de quién está detrás de los crímenes. Lamentablemente esta cinta carece de ese “algo” que genere el mismo sentimiento. 

Fue una sorpresa saber como esta producción se llevó a cabo en tan poco tiempo después de su última entrega, pero es entendible al tener una sola locación en esta ocasión y cuyo diseño de esta misma realmente es detallado al impregnar toda la esencia del país de las góndolas en una época tan fría. Por otro lado, el elenco destaca bastante bien y es otro detalle que realmente apoya a que este filme no decaiga; Kenneth Branagh repite su rol como el elocuente Poirot y tener a actores como Tina Fey o Michelle Yeoh, vuelven más disfrutaban la experiencia (aunque es una lastima que esta última tenga tan poca participación).

Tampoco podemos dejar pasar desapercibido la participación de Camille Cottin o Kelly Reilly, cuyo desempeño en pantalla es digno de su trayectoria. Para complementar este cast de primera tenemos a Jamie Dornan, Kyle Allen, Emma Laird, Ali Khan y Jude Hill, una generación que sin duda tiene mucho que ofrecer en el mundo del séptimo arte y que esperamos ver en más proyectos, pues su potencial es enorme y no tenemos duda de que llegarán bastante lejos si les dan la oportunidad.

A Haunting in Venice no revoluciona este género, pero gracias a su banda sonora, fotografía y elenco junto a una historia realmente interesante, cumple con entretener tanto a los fans del género como para quienes buscan pasar un buen rato. Se denota que en esta ocasión cómo Kenneth Branagh tuvo mayor libertad tanto creativa como en dirección, logrando así una opción ideal para esta temporada de Halloween. 

Tráiler oficial