El clásico de Disney se transforma en una nueva versión para seguir encantando a chicos y grandes.

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Hace muchos años, a finales de los años noventa e inicio de los 2000, Disney anunciaba sus estrenos en cines como su clásico número tal y tal, algo así como “Disney presenta su trigésimo quinto clásico, su trigésimo sexto” y esto era algo que generaba en nosotros su público una emoción inexplicable, era como estar presenciando algo épico, un evento inigualable. 

Entre todos esos clásicos, uno que marcó a toda una generación es “La Sirenita”. Aquella historia que adaptó el cuento de Hans Christian Andersen en una cinta de dibujos animados musical que fue todo un suceso en su época, tanto así, que en su aniversario número diez, la compañía del ratón le tuvo tanta confianza a este film que la relanzaron en cines justamente en las mismas fechas en que una 20 Century Fox naciente en animación lanzó la exitosa Anastasia.

La gente conocedora del tema comenta que la versión original de Disney de “La Sirenita” marcó un hito en la historia de la casa del ratón, pues se dice que abrió la puerta a la famosa “última época de oro” de Disney. Una era que nos traería hermosas cintas animadas como “Aladdin”, “El rey león”, “Pocahontas”, “El jorobado de Notre Dame”, “Hércules” y otras películas que sin duda son un antes en la historia del cine animado que desde esa fecha para acá jamás se ha vuelto a repetir en esta u otra casa productora de esa manera.

De las cintas mencionadas un par de ellas ya cuenta con un versión live action en época actual, y el resto seguramente está en desarrollo, pero dentro de este universo tan extraño y mayoritariamente mal adaptados, uno de los filmes que los fans más esperaban ver era la adaptación en actión real de “La Sirenita”.

“La Sirenita” de 1989 es una de esas películas animadas más queridas y recordadas, tanto por su historia tan emblemática como por temas musicales. La vida de una curiosa sirena que sueña con algún día vivir fuera del mar y que por sus convicciones lo es capaz de entregarlo todo, es una historia inspiracional que conmovió por años a pequeños y grandes cinéfilos, y este año por fin llega a la gran pantalla su adaptación live action que desde que se confirmó estuvo cargada de polémica.

Pero siendo sinceros… ¿A quién no le gusta un poco de polémica? Muchas veces la polémica hace más interesante el día a día, y si de crear controversia se trata, Disney es algo que maneja a la perfección. Y no nos malentiendan, no estamos criticando a la gran casa productora, solo estamos conscientes que cada paso que da la empresa lo da pensando en un objetivo en mente, cosa que a veces funciona y en otras ocasiones no resulta del todo bien, pero hablando particularmente del caso de esta nueva versión de Ariel, podemos decir felizmente que funciona.

No vamos a hablar de la historia de esta adaptación, porque la gran mayoría ya conoce de qué va la cinta animada y aquí la cosa es exactamente igual, pero de lo que sí podemos hablar de todo lo demás y de lo que rodea a esta nueva versión.

Para iniciar, la controversia (o polémica) de la que hablábamos antes, y de la que por años desde que se confirmó esta versión ha hecho mucho ruido en medios y redes, es la elección de la protagonista. Halle Bailey una joven cantante (desconocida para muchos) de R&B sin mucha trayectoria en la actuación, se convirtió de la noche en la mañana en el ojo del huracán por siquiera haberse atrevido a presentarse al casting de Ariel ¿Y cual era la causa de la crítica? Que la joven no era como todos imaginaban a la versión “original” de Ariel, pues ella es una chica afroamericana. 

Y es que no es posible que en pleno siglo XXI queramos medir el talento o valor de una persona por el color de su piel, pues en esta cinta Halle Bailey entrega todo su talento (en serio TODO) para darle vida a nuestra querida Ariel. Cada escena en la que Bailey aparece es una escena llena de brillo, sus ojos transmiten todo tipo de sentimientos y emociones que solo con guiñarlos encanta a todos por igual, como si de un hechizo real de sirena se tratara y cada momento de ella en pantalla es magia pura, en serio, no puedes sentir otra cosa por ella que no sea amor.

Otro gran acierto de esta cinta es la elección de Melissa Mccarthy como la genial Ursula, que es quizás en el mundo de los dibujos animados uno de los villanos Disney más recordados por todos, pues a pesar de hacer lo que hace, es irresistible no adorarla, pues su carisma es sobresaliente y no hay nadie más perfecto en el mundo para darle vida que la gran Melissa, que se roba por momentos la cinta con su interpretación, y si están preocupados por ciertos momentos ICÓNICOS de la cinta animada, no se preocupen que Melissa se los sirve ¡TODOS!

Y como en el mundo marino de “La Sirenita” siempre hay criaturas que no son del agrado de todos, lamentablemente en esta nueva versión los efectos especiales juegan ese papel, pues desde la primer escena podemos ver que quizás los especialistas en VFX no tuvieron el tiempo necesario para brindarnos en este metraje un mundo marino que se sintiera más real. Realmente aquí quizás no somos tan exigentes cuando vemos una cinta que sabemos que la mitad de ella usará este tipo de trucos para lograr un producto decente, pero es que desde que podemos apreciar la primera aparición al rey Tritón abandonamos toda la esperanza para el resto de las escenas bajo el mar, y aunque sí hay muchas muy bien logradas, vemos otras escenas que parecen una mezcla de dibujo animado o película en tercera dimensión.

Tal vez si Disney se hubiera arriesgado más, nos hubiera presentado quizás un mundo mitad realista y mitad animado, como aquella ya lejana “Encantada” del 2007 que mezclaba a la perfección dibujos animados y acción real, pero el filme ya está hecho y nosotros no somos ejecutivos de la compañía.

Si bien dentro de esta nueva adaptación existieron leves cambios y adiciones, estos no afectan el hilo central de la historia que ya conocemos, pues todas las canciones fantásticas se hacen presentes y cobran nueva vida en voz de estos nuevos intérpretes que las hacen vibrar como no lo hacían en hace mucho tiempo, y además, el todólogo Lin-Manuel Miranda hace su participación en este proyecto sumando tres nuevas canciones que seguramente van a encantar a las nuevas generaciones (porque las personas que pertenecemos a denomianda OLD SCHOOL nos seguimos quedando con el clásico sonido de Alan Menken) y que serán comentadas aun cuando su función haya acabado.

Como en todos los live action Disney seguramente habrá personas que les guste esta versión y otras que ni piensan ver esta película, y no los juzgamos. Anteriormente la empresa de Mickey nos ha presentado cintas para nada memorables y sin nada que rescatar, como la reciente Pinocho de Robert Zemeckis, y es que entendemos la difícil tarea que es el adaptar una obra animada tan amada en live action y nuestra actualidad. De por si vivimos en un mundo donde los peces no hablan, donde los niños no vuelan y sí tienen que crecer algún día, y es que al mutar de caricaturas a personajes en carne y al hueso se pierde parte de la magia y la fantasía que funciona bien en animación.

“La Sirenita” es quizás el estreno más grande de Disney en este 2023 a pesar de todo lo que se ha escrito sobre ella y todo aquello que se ha dicho, seguramente el boca en boca hará su hechizo de sirena y la gente termina por convencerse de que estos tiempos son distintos, de que la vida va cambiando y las generaciones van cambiando, de que el mundo necesita representación para los diversos grupos de personas que habitamos en él, y que hoy por hoy, necesitamos a más gente como Halle que sale a perseguir y conseguir su sueño, y eso, es mucho más poderoso que cualquier hechizo de bruja de mar.

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