El perfecto réquiem para un asesino a sueldo que se ganó nuestros corazones a punta de balazos.
Póster oficial
Ficha Técnica
- Título original: John Wick: Chapter 4
- Director: Chad Stahelski
- Año: 2023
- Guion: Michael Finch, Shay Hatten
- Personaje: Derek Kolstad
- Fotografía: Dan Laustsen
- Música: Tyler Bates, Joel J. Richard
- Elenco: Keanu Reeves, Donnie Yen, Bill Skarsgård, Laurence Fishburne, Hiroyuki Sanada, Rina Sawayama, Marko Zaror, Ian McShane, Natalia Tena, Lance Reddick
- Distribuidora: Corazón Films
- Fecha de estreno: 23 de marzo de 2023 (México)
User Review
( votes)Hay héroes y heroínas de acción que han marcado la historia del cine. Desde esa época gloriosa de los 80s donde los nombres de John McClane (Bruce Willis en Duro de Matar), John Rambo (Sylvester Stallone en la saga homónima), Ellen Ripley (Sigourney Weaver en la saga de Alien), Sarah Connor (Linda Hamilton en la franquicia de Terminator), Jean Claude Van Damme o Arnold Schwarzenegger, entre muchos otros, donde sus roles eran prácticamente indestructibles y no les tocaban ni un pelo para salir siempre victoriosos.
Fue hasta tiempos más recientes con sagas como la de Jason Bourne (Matt Damon), o el mismísimo James Bond, cuya última encarnación corrió a cargo de Daniel Craig, entre otras figuras, donde la vulnerabilidad del héroe de acción se volvió algo interesante. Los nuevos personajes del género no están exentos a las heridas, a los demonios del pasado o incluso, a la muerte. Sin embargo, eso no quiere decir que no reparten golpes y balazos a todos aquellos que se metan en su paso sin importar las consecuencias y seguir siendo los últimos hombres en pie.
Definitivamente una de esas nuevas figuras de acción llegó con el ya veterano Keanu Reeves en la figura de un asesino a sueldo retirado que, al perder al perrito que su difunta esposa le regaló a manos de un montón de criminales, decide volver para cobrar venganza con John Wick (Chad Stahelski, 2014). Después de esa primera entrega que conquistó al público y la audiencia por igual, el universo se expandió con otras dos secuelas en las que el realizador, que fue un doble de acción antes de pasar detrás de la cámara, exploró más del pasado de este personaje, creando un mundo bastante interesante en el que la acción predominaba sobre la historia.
Pero toda buena historia debe encontrar un final. Por ello, esta saga moderna de acción pura entrega su último capítulo en John Wick 4: Baba Yaga, donde el camino de este asesino seguirá enriqueciendo aún más la leyenda del ‘Coco’ de los maleantes. Wick está recuperado de su casi muerte al final de la anterior entrega y ahora va en busca de su libertad. Pará ello tendrá que enfrentarse a La Mesa, que sigue buscando tener su cabeza en un plato. Pero la llegada de un nuevo líder de este gremio criminal (Bill Skarsgard) alterará los planes del ‘hombre de negro’, llevándolo a tener un último encuentro donde, como no, el duelo es a matar o morir.
Keanu Reeves sigue mostrándose en buena forma, entregando la solemnidad y dolor de Wick en su rostro. Asimismo, luce en las escenas de acción del filme, mismos que van creciendo conforme avanza la cinta en cuanto a complejidad y espectacularidad. Aunque la edad ya se le nota un poco en la movilidad de Wick, no deja de ser impresionante el gran esfuerzo que hace para consolidarlo como uno de los héroes de acción más memorables de la historia del cine. Pero John no sería nada sin la ayuda de sus compañeros de cast, entre ellos Donnie Yen (la saga Ip Man), que con su rol de Caine resulta ser el perfecto balance para Wick en un papel que rememora bastante al viejo samurai ciego, Zatoichi.
Entre el cast también hay viejos conocidos que han lúcido antes en otro tipo de filmes. Primero tenemos al japonés Hiroyuki Sanada (Shimazu), con el que Reeves trabajó en 47 Ronin previamente. La química lograda entre ambos durante el tiempo que aparecen en pantalla es muy buena. Asimismo, las secuencias de acción en las que participa son bastante destacadas. Por otro parte también está un viejo conocido de Yen, Scott Adkins, que ofrece una encarnación intimidante de un gansgter alemán rudo (Killa) que parece no temerle ni al Baba Yaga. Ni que decir del Rastreador, interpretado por Shamier Anderson, que se suma a esta ecuación de acción demencial con un rol que, extrañamente, estará muy ligado a Wick de diferentes formas.
Conforme la saga de este matón vengador ha crecido, la historia cada vez se vuelve más simple, existiendo sólo para servir de pretexto a lo que todos esperan de la misma: acción y balazos. Pero cabe destacar que, durante sus casi 3 horas de duración, este cuarto filme sigue entregando pistas y cerrando arcos que pueden funcionar muy bien para el futuro de la franquicia, ya sea la serie precuela The Continental o el spin off de Ballerina. Esos pequeños momentos que tiene el relato que no son golpes, funcionan muy bien para comprender los motivos, crear antagonismo y, sobre todo, aplaudir las causas o el honor detrás de estos asesinos.
Una de las virtudes de Stahelski es que, nuevamente, las secuencias de acción en toda la película van aumentando en su locura e impacto. Hay partes en las que Chad usa autos como ni siquiera la saga de Rápido y Furioso lo ha hecho, o incluso juega con un plano secuencia brutal desde una toma cenital que contagia una sensación de adrenalina precisa. Es en este tipo de escenas donde el realizador demuestra el aprendizaje que está tetralogía le ha dejado, permitiéndole experimentar para sacar lo mejor de la acción de John Wick y compañía.
Además, la franquicia, que ya se había salido de los Estados Unidos para ampliar el alcance de esta organización y sus familias, aquí utiliza diferentes estilos de pelea durante diferentes momentos, todos y cada uno salido de otros géneros como el de samurais en Japón, la clásica cuerpo a cuerpo en el antro, o el western en el clímax final. Ni que decir del aspecto visual donde la fotografía es otro punto clave, jugando con los amaneceres, la noche y una paleta de colores bastante viva que va desde los azules metálicos hasta el rojo, siempre al servicio de la acción del relato.
Con un cambio en el diseñador de vestuario que hace mucho más elegante el porte de esta masacre, John Wick 4 es el perfecto réquiem para un asesino a sueldo que se ganó nuestros corazones a punta de balazos por defender el honor de su mujer y su perrito, ofreciendo un cierre prácticamente perfecto al espectáculo de acción que toda la franquicia planteaba. Y aunque esta podría ser la última cinta de Reeves como este trajeado pero letal personaje, no cabe duda que se ha ganado un lugar en la historia de este tipo de cine, en el que John comparte silla con otros compañeros legendarios como Rambo o McClane.
Tráiler oficial