La poderosa y hermosa confirmación de Del Toro como narrador.
Póster oficial
Ficha Técnica
- Título Original: Guillermo del Toro’s Pinocchio
- Directores: Guillermo del Toro, Mark Gustafson
- Año: 2022
- Guión: Guillermo del Toro, Patrick McHale
- Personaje: Carlo Collodi
- Historia: Guillermo del Toro, Matthew Robbins
- Música: Alexandre Desplat
- Cast de voces: Gregory Mann, Ewan McGregor, Tilda Swinton, David Bradley, Christoph Waltz, Finn Wolfhard, Ron Perlman, Cate Blanchett
- Distribuidora: Netflix
- Fecha de estreno: 9 de diciembre de 2022 (México)
User Review
( votes)Guillermo del Toro es uno de los paladines más importantes de la creatividad e imaginación de los últimos 30 años. No solo por su incesante curiosidad que lo ha llevado a contar historias llenas de monstruos. Tampoco por su apuesta constante y sonante por los efectos prácticos en detrimento de un abuso (casi de libreto) del CGI. O por la preocupación al detalle que es una rama de lo que su compromiso con todo proyecto en el que se involucra como director, guionista, productor o, como suele ser, todas estas a la vez.
Este calificativo se da, sobre todo, por ir más allá del mero hecho de hacer películas, producciones audiovisuales o el de incentivar a los futuros narradores a atreverse a ir más allá de lo que establece el mercado. En el caso de “Don Memo”, sus criaturas, su constante pero siempre vigente analogía a los verdaderos monstruos, su estilo, su sello estético, es su arma más importante y valiosa, con la que siempre blande, cual guerrero, contra la monotonía o el desgaste de los blockbusters, por no decir que combate esa crisis que parece aquejar y que se manifiesta con remakes, reboots, nuevas versiones, así como spin offs que solo están ahí por el dinero fácil, sin esfuerzo.
Para romper con esto último, Del Toro junto a Mark Gustafson, con el respaldo del gigante del streaming y tras 15 años de intenso trabajo, nos traen su versión en stop motion de Pinocho, una visión poderosa, emotiva pero fresca de un clásico que se ha retomado pero no con el brillo de esta producción.
HISTORIA
El carpintero Gepetto vive completamente solo y aislado en la Italia de la década de 1930, mientras el fascismo va creciendo a su alrededor. Cansado de esta situación, decide cambiarlo él mismo y crea a un hijo de madera al que llamará Pinocho. Una noche gracias a un poco de magia el muñeco de madera cobra vida y cumple todos los sueños de Gepetto de tener un pequeño hijo. Sin embargo, Pinocho no es como el carpintero espera, en vez de ser obediente y tranquilo, el niño adora la diversión y las travesuras. Pinocho está harto de no ser lo que su padre desea, así que se marcha a vivir aventuras, pero pronto se dará cuenta de que ha ido demasiado lejos.
OPINIÓN
Lo primero a destacar y que desde este espacio, se aplaude de pie, es el arduo trabajo que se le ha dedicado a la realización de este proyecto. Escenarios que dejan perplejo al espectador, movimiento fluido que es producto de una labor de calidad, el cuidado milimétrico de cada vestuario, objeto o elemento del pueblo italiano, así como de un diseño que le da un personalidad tétrica, extraña pero encantadora a los personajes. Todo esto resulta en un mundo en el que se puede entrar y disfrutar desde el primer momento.
El colorido presente en cada escenario a la vez que cierta oscuridad van hilando las diferentes emociones presentes en cada secuencia. La fotografía Frank Passingham, quien tiene experiencia con este tipo de animación y que resaltó en cintas como Kubo, Lo que el agua se llevó o Las aventuras secretas de Tom Thumb, permite disfrutar de cada uno de los elementos que con tanto cuidado se han colocado, haciendo que el público olvide por momentos que está viendo una animación y sienta a los personajes reales.
La música del multipremiado y legendario Alexandre Desplat es destacada, ya que acompaña a la perfección cada una de las escenas e ilustra con sus partituras melancólicas a la vez que esperanzadoras, el tono de la cinta que es un tanto oscuro, un tanto festivo, un tanto nostálgico, que hacen de todo esto una auténtica carta de amor a la técnica de cuadro por cuadro.
Es innegable que Del Toro y Matthew Robbins aciertan al elegir la época fascista italiana para poder dar mensajes que, pese a la distancia temporal, son igual de vigentes para estos tiempos. También hay que agregar que esta elección impulsa de una manera un tanto sórdida y explícita cada uno de los mensajes presentes que van desde la imperfección como una parte con la que tanto padres e hijos deben aprender a aceptar para mejorar, la amistad que muchas veces llega de maneras distintas e inesperadas, la inutilidad de la guerra, hasta una reflexión sobre la vida y la esencia del ser humano.
Los personajes están sólidamente establecidos y son presentados sin tapujos a la hora de plasmar esos matices que los alejan de la perfección, como en los casos de Gepetto que lo vemos alcohólico por la muerte de su primer hijo Carlo, la crueldad del Conde Volpe que simboliza la codicia que utiliza hasta la violencia para conseguir lo que busca o el propio Pinocho, que en lugar de estar establecido como un niño malicioso es simplemente un infante curioso que tiene mucho que aprender y con los obstáculos que trae consigo la manera en la que está hecho.
Respecto a lo anterior, se debe señalar que algunas motivaciones y acciones son necesarias para avanzar la trama, siendo Spazzatura el más claro, ya que este personaje hace cosas que pueden descolocar a quienes no conecten. No obstante, es menester aclarar que siguen esa lógica de fábula y es justo con este mono ayudante que se nos deja un mensaje de redención bastante satisfactorio, a la par de un móvil bastante efectivo de crítica al maltrato animal.
En cuanto a la historia, si bien la narración sigue el orden que se conoce de la historia y la mayoría de los personajes son los mismos, lo cierto es que la grandeza de esta reinvención radica en el filtro temático, contextual y hasta mitológico le dan un giro a la vez que fuerza a esta película. Las decisiones que se toman, aunque predecibles, poseen una energía emocional que hace inesperado el impacto que puede llegar a tener, con un final espectacular que dejará a más de uno trastocado por la cercanía forjada a lo largo de casi 2 horas.
Las actuaciones tanto de voz como de doblaje son de alto nivel, destacando un cast atractivo que incluye a Ewan McGregor en el papel de Sebastian J. Grillo, Tilda Swinton como el Hada Azul, David Bradley (Argus Filch en la saga de Harry Potter) como Gepetto, Ron Perlman como Podesta, Christoph Waltz como el Conde Volpe, Finn Wolfhard como Lampwick o Lucignolo y Cate Blanchett como Spazzatura. Cada uno de ellos lo hace con compromiso y talento.
Con un tono sórdido y un encanto tanto visual como de interpretación, Pinocchio de Guillermo del Toro es una experiencia cinematográfica que demuestra toda la maestría del director tapatío como narrador, creativo y director comprometido con ofrecer cintas que permanezcan en la memoria. Una de las cintas más destacadas de animación de los últimos años, antídoto para el veneno que se ha esparcido con la crisis creativa de estudios que antaño eran cuna de historias memorables y quizá el proyecto más personal de un gran defensor de la imaginación como lo es Del Toro.
Tráiler oficial
